Algunas técnicas de estudio útiles para comenzar este ciclo

Durante la primera semana de este ciclo 2018-B, los estudiantes del CULagos están recibiendo los programas de cada asignatura que cursarán; en ellos se especifican las formas en las que serán evaluados. Sabemos que, semestre con semestre, los principales objetivos de los estudiantes consisten en aprovechar todo el aprendizaje y obtener buenas notas. Uno de los mayores retos a los que se enfrentarán para conseguirlos, consistirá en entregar productos de calidad sin desgastar su estado anímico o de salud. Es por ello que la maestra Lilia Rodríguez Palos, responsable del Centro de Atención Psicológica a la Comunidad del CULagos, nos ha compartido algunas estrategias de estudio que pueden ser útiles para alcanzar nuestras metas.
 
Entendemos las estrategias de aprendizaje como el tipo de pensamientos, acciones, comportamientos, creencias e incluso emociones que nos ayudan a adquirir información y nos permiten fortalecer un conocimiento, de manera que después podamos utilizar esa información. Por ello, es importante considerar qué técnicas de estudio son las más adecuadas, conforme a nuestras maneras de aprender: a través de la vista, por lo que nos facilita más tener a la mano indicadores gráficos; mediante la audición, de manera que podemos recuperar fácilmente lo que el profesor dijo en clases; o mediante la experiencia de cómo se aplica alguna cosa o cómo se hace algo.
 
Algunos factores que influyen en el aprendizaje pueden ser intelectuales: los conocimientos previos sobre algún tema, la motivación y sobre todo las técnicas y hábitos de estudio; e incluso el estado de relajación, la atención, el interés y la motivación por aprender. Mientras que los factores externos se encuentran en el espacio, el mobiliario, la iluminación, el silencio con el que se cuenta para realizar las actividades. Además de considerar el lugar en el que llevamos a cabo nuestros estudios, también hay que tener en cuenta el horario que destinamos para ello. Algo muy importante para enriquecer el conocimiento, consiste en encontrar el vínculo que cada asignatura puede tener con las demás.
 
Una vez considerados estos aspectos, es importante conocer nuestros hábitos de estudio, para ello es útil responder a preguntas como: ¿soy independiente para hacer mis tareas? ¿Cuento con el material necesario para realizar mis actividades? ¿Evito compromisos innecesarios? ¿Comparto mis dudas y mis aprendizajes con mis compañeros de clase? ¿Reformulo qué cosas he aprendido y qué me falta al término de un tema? ¿Identifico claramente lo que aborda un texto? ¿Formulo preguntas para organizar mis lecturas o hago notas marginales? ¿Hago cuadros sinópticos? ¿Realizo resúmenes? ¿Le pregunto al profesor sobre lo que leí? ¿Puedo recordar fácilmente lo que he leído al día siguiente?
 
Por último, la tecnología bien aplicada puede ser un auxiliar muy útil para conseguir nuestros objetivos. Existen algunas aplicaciones que pueden ser importantes aliadas: desde aquellas diseñadas para tomar notas; aprender y estar informado mediante cursos online, videos, tutoriales o audiolibros; hacer citas en estilo APA; organizadores de tiempo que crean listas de tareas, las personalizan y permiten compartirlas con amigos; las aplicaciones para eliminar los distractores; y, por supuesto, de aprendizaje de idiomas, además de las plataformas virtuales que brindan la posibilidad de compartir contenido y trabajar en equipo en tiempo real.
 
A t e n t a m e n t e
"Piensa y Trabaja"

Guadalajara, Jalisco, 16 de agosto de 2018
 
Redacción: Marina Ortiz
Fotografía: archivo