Inaugura CULagos oficina de enlace con la Defensoría de los Derechos Universitarios de la Universidad de Guadalajara

Este jueves 11 de abril se dio a conocer en el CULagos el espacio que funcionará como oficina de enlace con la Defensoría de los Derechos Universitarios de la Universidad de Guadalajara, que será el primero entre los centros que conforman la Red Universitaria. En el corte de listón se contó con la presencia del doctor Dante Jaime Haro Reyes, Defensor de los Derechos Universitarios, quien señaló que “en toda la red de los centros universitarios, CULagos es el que pone el ejemplo para poder, a final de cuentas, ir a la vanguardia de esta nueva propuesta de centros de paz y de defensoría”. Además de este acto, el doctor Haro Reyes tuvo un primer acercamiento en dicha oficina con integrantes de la comunidad universitaria. El doctor Aristarco Regalado Pinedo, Rector del CULagos,  agradeció la presencia del Defensor para inaugurar este espacio que contribuirá a mejorar las prácticas en la defensa de los derechos de la comunidad universitaria.
 
En este marco, también se llevó a la conferencia Los derechos humanos y los derechos universitarios en la actualidad, en la que el Defensor explicó cómo estos dos conceptos se complementan y cómo han ido desarrollándose a través de la historia. Así pues, estableció que los derechos humanos reconocen el valor y la dignidad de la persona, considerándolos como un principio que está incluso sobre las constituciones; reconociendo también que, a pesar de que en los últimos tiempos la inercia va llevando a volcarse a favor de los derechos humanos, en algunos países no existe el andamiaje necesario para que éstos principios sean practicados y que existen problemáticas propias de cada situación geopolítica.
 
Sin embargo, también es importante considerar que el conjunto de ideales que componen este concepto se han ido ampliando, conforme a los procesos sociales la visión de esta dignidad consideró en su primera generación igualdad de derechos civiles y políticos; en una segunda etapa se amplió a los derechos económicos, sociales y culturales; en la tercera generación abarcó también los derechos de los pueblos, y ahora se habla de una cuarta generación que considera parte de los derechos humanos eliminar la brecha que existe entre quienes poseen el acceso a las nuevas tecnologías y quienes no.
 
Esto nos ayuda a comprender, desde las perspectivas internacional y nacional, y la declaración de los derechos humanos, el marco jurídico en el que se gestan las Defensorías de los Derechos Universitarios. En nuestro país se creó hace treinta años la  CNDH, y al poco tiempo en la UNAM comenzaron a establecerse los derechos universitarios, que integran también las prerrogativas y obligaciones que marca la normatividad de cada institución. Es así como la figura de un defensor tiene entre sus atribuciones  la autonomía en el ejercicio propio y puede emitir recomendaciones incluso al Rector General; siendo primordial que se promuevan los derechos humanos y universitarios y se coordinen acciones de prevención, además de la atención a los casos en los que se presentan actos de violencia.
 
Algunas de las recomendaciones del doctor Haro para los universitarios son: “que se pueda pasar de manera muy propia, muy directa, del anonimato hacia lo que es la confidencialidad, para poder presentar denuncias. Es decir: que puedan acercarse a presentar cualquier denuncia, cualquier queja, para que la hagan del conocimiento de nosotros y empezar, a final de cuentas, a romper ese círculo vicioso que había de que no se hacía nada porque no había denuncia y no se trabajaba en esa denuncia para poder castigar o sancionar. Ahora lo que tratamos es caminar de la mano con las autoridades, con el alumnado, con las mujeres, los hombres, estudiantes, profesores, para poder construir conjuntamente lo que es terminar con las violencias, con esa parte de discriminación que pudiera haber y construir una cultura de paz”.
 
A t e n t a m e n t e
"Piensa y Trabaja"

Lagos de Moreno, Jalisco, 12 de abril de 2019
 
Redacción y fotografías: Marina Ortiz