Concluye exitosamente el programa “Peraj-adopta un amig@” en el CULagos

arios de los estudiantes de Psicología decidieron hace un año realizar su servicio social  en el programa Peraj por segunda ocasión.

    Peraj es un programa nacional en el que jóvenes universitarios realizan su servicio social —a lo largo de todo el año escolar— como tutores (uno a uno) de niños de primarias públicas, apoyándolos y motivándolos para desarrollar su máximo potencial. El programa busca que por medio de una relación significativa y personalizada entre el universitario y el niño se fortalezcan en el menor: su autoestima, sus habilidades sociales, sus hábitos de estudio, y se amplíe su cultura general y sus horizontes. El joven universitario que funge como tutor se convierte en un modelo positivo a seguir para el amig@.

 

     Los resultados fueron mayores a los esperados. Los niños y los tutores crearon vínculos afectivos que sobrepasan los de las tutorías.

     Dentro del programa Peraj se concientizó al niño al cuidado del agua, se fomentó el deporte y la cultura a través de diferentes actividades físicas y artísticas, se aliento al  niño por medio de diferentes dinámicas.

Una de las menores   mencionó  estar muy agradecidos con sus tutores porque dentro del programa habían aprendido a leer y  a compartir con sus demás compañeros.

      Los padres de familia agradecieron a cada uno de los tutores y a la universidad por crear espacios que ayudan de manera desinteresada a los niños  de primarias públicas.

      El martes 16 de junio fue la clausura del programa en la sede Lagos de Moreno. Aquí, los tutores y los niños recibieron  un reconocimiento por parte del doctor Zacarías Castillo, quien  agradeció a los padres de familia y a los amigos Peraj por depositar su confianza en los universitarios. Así mismo, los invitó a formar parte de esta universidad, pues es fundamental que vean la posibilidad cercana de cursar una carrera profesional en cualrquier casa de estudio.

       Así, el Centro Universitario de los Lagos se siente orgulloso de sus prestadores de servicio social, de los padres de familia que confiaron a sus hijos, de las escuelas públicas que abrieron sus puertas para recibir la invitación y con quienes estableció vínculos importantes con diferentes primarias y con los niños que participaron en el programa.