El México no conquistado del periodista John Gibler

Hablar del México Rebelde que describe de manera magistral John Gibler es hablar de los de abajo, a quienes por cierto ha dedicado este libro, a quienes hiciera referencia también en su extraordinaria obra literaria “Los de Abajo” el maestro laguense Mariano Azuela.
 
Pero ¿quiénes son los de abajo? los de abajo, son aquellos ciudadanos que sufren y viven la pobreza, aquellos que sufren y viven la desigualdad social; los de abajo son las victimas de la violencia ejercida por el estado, las victimas del sistema. Lo son también los indígenas y los campesinos.
 
 
Este conjunto de crónicas logran describir muy bien el México que es ahora y que de acuerdo a la comparativa de los hechos históricos no ha dejado de ser. Gibler nos cuenta de ese México que siempre ha luchado por la igualdad y por la libertad, nos cuenta de cómo ese México antiguo y nuevo ha desafiado su condición y luchado en contra del imperialismo, del sometimiento en todas sus representaciones; hasta las formas más sutiles, en las que, si cabe el término, ha evolucionado la colonización.
 
 
Nos habla del resultado de más de 70 años del PRI en el poder, el legado de Carlos Salinas de Gortari –la devaluación y el Tratado de Libre Comercio (TLC)- la máxima expresión, dice Gibler, de las nuevas formas de conquista. Acuerdo que motivara también el levantamiento del Ejercito Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) quienes bajaron de lo más recóndito de las montañas chiapanecas para luchar y resistir en exigencia del respeto de sus derechos más elementales. Esa resistencia que denunciaba y lo sigue haciendo el hecho de que en el nombre del “Estado de Derecho” se impongan medidas económicas, se asesine, se encarcele, se viole, se destruya, se persiga, se haga la guerra, dijera el Subcomandante Marcos, que cita muy oportunamente John Gibler.
 
 
El levantamiento del EZLN vino a desenmascarar a ese México que no era el que proyectaban los gobernantes ante el mundo, un México rico, próspero. El movimiento zapatista vino a exponer cómo en los pueblos indígenas de Chiapas había niños y niñas que morían por no tener al alcance una aspirina para aliviar una fiebre. Los indígenas se levantaron para decir: aquí no llegan los “beneficios” de ese Tratado de Libre Comercio.
 
 
Aquí como en casi todos los pueblos latinoamericanos, “el subdesarrollo no es una etapa del desarrollo, sino su consecuencia”, escribiera Eduardo Galeano en su obra Las Venas Abiertas de América Latina.
 
 
Dice Gibler que “la pobreza es una idea que impone realidades más que describirlas”, habría que darse cuenta de la realidad que en este sentido impera en nuestro país. Un país donde más de la mitad de su población vive en pobreza, es decir unos 52 millones de habitantes, unos 25 millones en pobreza extrema, de ellos una buena parte niños y niñas mexicanos que no les dejan más opción que el trabajo forzado, la migración o la prostitución. Un país donde hay un programa gubernamental titulado –Oportunidades- que no es más que la repartición de dinero para “apoyar a la economía familiar”, cosa que no soluciona el problema de raíz sino que se queda en lo superficial, en lo temporalmente funcional y no da resultados en los problemas sustanciales del país, en el que las –oportunidades- se reducen cada vez más.  
 
 
Este libro aborda también la supuesta “transición democrática” del PRI al PAN en el año 2000,  del fraude electoral de 2006 y de las movilizaciones que éste hecho generó, también habla de la creciente y opulenta clase política mexicana; de las terribles violaciones a los derechos humanos que sufrieron pobladores de San Salvador Atenco, de las movilizaciones y huelgas de los maestros en Oaxaca, de la migración.
 
 
Entre el año 2000 y 2005 por la falta de oportunidades o por la violencia, más de cuatro millones de mexicanos salieron del país hacía Estados Unidos. Los índices de migración son alarmantes y este es un tema que generalmente no se observa desde la perspectiva de la infancia, un sector de la sociedad al que los medios de comunicación y los periodistas, no recurren, salvo el día del niño y es un sector que tiene mucho que decir y que además tiene el derecho a ser tomado en cuenta. Pues en uno de los apartados de este libro México Rebelde, Crónicas de Poder e Insurrección Gibler sí los toma en cuenta y escuche usted de qué manera le respondieron los alumnos de una pequeña escuela rural de Acámbaro, Guanajuato, a la pregunta expresa ¿qué es la migración?:
 
 
 
*Los niños de quinto
Entro a un salón lleno, con 27 alumnos de quinto año. Les pregunto:
-¿Qué es la migración?
-¡Los que se van al norte!- grita una voz.
-¡Los que no tienen papeles!- dice otra.
-¿Y porqué emigran?- vuelvo a preguntar.
-¡Para trabajar! ¡Para apoyara sus familias!- gritan todos al mismo tiempo.
-¿Y porqué se van a trabajar allá y no aquí?
-¡Ganan más!
-¡Aquí no hay trabajo!
Pregunto quién  tiene un familiar en los Estados Unidos y todo el salón levanta la mano. Todos. En total, contando a la maestra, 28.
Diez tienen hermanos o hermanas en los Estados Unidos; otros 10 tienen a alguno de sus padres en ese país.
-¿Quién tiene un tío o una tía en los Estados Unidos?
Todos levantan la mano.
 
Les pido a los niños que saquen una hoja en blanco y una pluma o un lápiz, y respondan dos preguntas: ¿qué es la migración?, ¿porqué emigra la gente?
 
Francisco Javier, 10 años: “Los emigrantes son los que se van a los Estados Unidos y luego a otros lugares y hay jóvenes que se van y dejan sus familias en México. Emigran al otro lado para mandar dinero a sus familias para que puedan sobrevivir”.
 
José, 11 años: “La migración es cuando a unos hombres los persigue la policía cuando se van al norte entonces tienen que irse escondiendo de la policía. Se van de mojados para darle de comer a sus familias y para poder comer y sobrevivir”.
 
Jesús, 10 años: “La migración es cuando las personas viajan al otro lado. Se van para ganar dinero para sus familias”.
 
Anayeli, 10 años: “La migración es cuando la gente se va al norte sin papeles. Se va para ganar dinero para sus familias”.
 
Geovani, 12 años: “La migración es cuando la gente no tiene dinero”.
 
Diego, 10 años: “La migración es cuando una persona se va a Estados Unidos para apoyar a su familia”.
 
Juana, 11 años: “La migración es cuando una persona se va al otro lado sin pedir permiso de las autoridades arriesgándose a muchos peligros para apoyar a su familia. Se van para apoyar a sus familias y para que la gente sepa que todos pueden hacerlo, no solamente los hombres”.
 
 
 
Hay que leer México Rebelde, Crónicas de Poder e Insurrección  porqué es un aporte importantísimo en la historia reciente de nuestro país, la historia de la resistencia, del estallido colectivo de una misma causa, una causa justa, que muchas veces se queda de lado en el ajetreo de la información diaria, una historia que comparten muchos pueblos de Latinoamérica, del mundo, pueblos que tienen en común el compartir las mismas luchas, la misma sangre.  
 
 
Esta obra es la  propia historia de John Gibler recorriendo nuestro México, siendo testigo del desafío que el pueblo mexicano sortea día a día con un mismo objetivo: la lucha por la libertad y la igualdad entre los habitantes de este hermoso país machado por la corrupción, sumido en la violencia, un país en el que hay contrariedades excesivas pues aquí vive el hombre más rico del mundo, Carlos Slim, y donde en contraste la mitad de su población vive en condición de pobreza, un país que se ha colocado en segundo lugar a nivel mundial por la peligrosidad que significa ejercer el periodismo, en el que han muerto más de 60 mil personas en esta –guerra contra el narcotráfico- y que aún con todas estas agravantes la gente se levanta y día a día sortea una vez más su individualidad y se suma, de una u otra manera, al grupo social que sale y exige mejores condiciones para todos, como lo reclamaban los que lucharon por la independencia de este país y como lo hicieron también nuestros antepasados luchadores sociales que se levantaron para hacer la revolución, una revolución que continua hoy en nuestros días y que retrata muy bien Jonh Gibler en su México Rebelde en sus crónicas de poder e insurrección.
  

Texto: Cristina Bravo*

*Cristina Bravo es egresada de la licenciatura en periodismo de la Universidad de Guadalajara. Participó como reportera en Radio Universidad de Guadalajara en Ocotlán (2008 – 2009). Actualmente es reportera y productora general de Medios UDG Noticias Lagos de Moreno.