La oratoria como vehículo para la libertad, vista desde la perspectiva de Agustín Rivera y Sanromán

El Seminario de Historia Mexicana continúa con su ciclo dedicado a la figura del ilustre laguense Agustín Rivera y Sanromán. Este miércoles 25 de mayo fue la ocasión para contar con la participación del doctor David Carbajal López, perteneciente al Cuerpo Académico de Cultura y Sociedad de este centro universitario. En su charla titulada “Los sermones de Agustín Rivera y Sanromán”, pudimos escuchar un poco de la importancia que tuvo para este erudito el uso adecuado del discurso en voz alta por parte de un líder (de cualquier índole: política, religiosa o social).
 
Rivera y Sanromán tenía en alta estima los logros de la capacidad educativa de la oratoria, y para ello consideraba fundamental que en el discurso existieran la sencillez, la claridad y la emotividad. Para Agustín Rivera una buena oratoria era producto e instrumento para la libertad, mientras que una mala oratoria tenía consecuencias sociales directamente opuestas. El discurso consistía en el vehículo a través del cual los líderes impulsarían la lucha a favor de la civilización y el progreso. De ahí que sostuviera que muchos de los grandes problemas de la Nueva España se originaban desde que había inconsecuentes y malos oradores. 
 
Existió siempre un reproche de Agustín Rivera contra la predicación novohispana: por la abundancia de citas latinas, la oscuridad, el embrollo (resultado de lo anterior), la falta de persuasión y de sentimiento y referir “consejas y sandeces”. Esto contrastaba fuertemente con su ideal acerca del discurso. Fue determinante la elaboración por parte Agustín Rivera de la teoría del genio: la definición del modo de ser natural y peculiar, que por naturaleza es defectuoso, “pero la oratoria puede permitir, con el auxilio de la razón y de la gracia, rectificar”. En el contexto del siglo XIX pensar esta teoría para la consolidación de una nación era muy importante, ya que la nación era algo natural, un elemento fundamental para construir los genios individuales. La oratoria sagrada auténtica, a través de un verdadero examen de conciencia individual, era elemento fundamental en este proyecto de nación.
 
Los invitamos a permanecer, a través de este medio, al pendiente de la programación que el Seminario de Historia Mexicana prepara mes con mes en torno a estos temas, para profundizar en el conocimiento de la interesante figura de Agustín Rivera y Sanromán.
 
 
Texto: Marina Ortiz
Fotografías: Sagrario Villalobos