Yamile Citlalli Hernández Pérez y Estela Martínez Pérez son estudiantes de Ingeniería Bioquímica de nuestro centro universitario. Durante el ciclo 2019-A realizaron movilidad a la Facultad de Química de Universidad de la República, en Uruguay. Ambas tenían el sueño de hacer movilidad académica y comenzaron a motivarse más cuando supieron que lo compartían, de manera que hicieron trámites juntas. Su objetivo inicial era ir a la Universidad de Talca, en Chile, pero dado que la oferta académica de su ingeniería era de reciente creación, no resultaba muy propicia para la movilidad. Al darse cuenta de ello, la mayoría de las plazas ya estaban elegidas; entre sus últimas opciones se encontraban España y Uruguay. Su elección final fue permanecer en el continente americano, ya que consideraron que en Europa todo iba a ser menos económico.
Al llegar a su destino se sorprendieron, porque Uruguay resultó ser un país muy caro. Esto hizo que el inicio fuera un poco complicado. Además, se encontraron con que los uruguayos no son las personas más cálidas al comienzo; esto cambió después, ya que con el tiempo los mismos habitantes se esforzaron por mostrarles lo mejor de su país. El espacio en el que vivieron durante su estancia fue una casa internacional, en la que tuvieron la oportunidad de convivir con estudiantes de diferentes nacionalidades, la mayoría europeos, quienes cursaban sus estudios en negocios internacionales o economía en universidades privadas. Este último factor fue peculiar, ya que estas instituciones contaban con un grupo especial para estudiantes de intercambio, lo que significaba facilidades con las que Yamile y Estela no contaban.
El reto académico no fue menor: la Facultad de Química de la Universidad de la República fue fundada hace más de cien años, de esta tradición viene también una forma muy estricta para la impartición de los cursos, en los cuales las clases están divididas entre lo teórico y lo práctico, además de que el nivel de conocimientos es muy profundo, ya que las materias están seriadas y es necesario cursarlas contando ya con sus respectivos prerrequisitos. Otro aspecto interesante es que, al ser una institución pública, a los cursos asistían entre cien y doscientos estudiantes, por lo que no era muy viable el diálogo con los profesores o el intercambio de ideas entre compañeros de la misma clase.
Esto las llevó a buscar estrategias autodidactas, apoyándose en bibliografía y videos, y aprovechando algunas ventajas, como el que pudieran prepararse previamente con las diapositivas de las clases, que estaban disponibles en el centro de fotocopiado antes de cada sesión. Las exigencias las llevaron al grado de permanecer estudiando mientras que sus compañeros de casa se reunían para hacer un asado. No podían arriesgarse a reprobar una materia, ya que esto suponía tener que devolver el dinero de la beca. Esto las llevó a decidir dar de baja la asignatura de bioquímica y quedarse solamente cursando Química orgánica, Laboratorio y Prevención de riesgos. Además de que aprendieron a trabajar en equipo, los maestros se mostraron dispuestos a ayudarles y orientarlas para alcanzar el nivel, por lo que sus esfuerzos rindieron los frutos esperados.
La experiencia de movilidad académica fue acompañada por el frío del invierno en el sur del continente, y complementada con la oportunidad de viajar a otros países y de disfrutar de las playas de Uruguay. Recuerdan con emoción que en Punta del Este hay una isla en la que habitan lobos marinos. De Montevideo, la ciudad en la que realizaron su estancia, valoran el respeto con el que los ciudadanos se dirigen, rememorando con gusto haber podido transitar por las calles sin ser acosadas. Ambas consideran que la suerte de que pudieran realizar juntas la movilidad fue una ventaja, ya que fueron infundiéndose ánimos conforme resintieron la lejanía de familiares y amigos y también cada que enfrentaron diferentes dificultades. Recomiendan a los estudiantes del CULagos atreverse a la experiencia de la movilidad ya que es grande la satisfacción y el aprendizaje que se obtienen.
A t e n t a me n t e
"Piensa y Trabaja"
Lagos de Moreno, Jalisco, 18 de diciembre de 2019
Redacción: Marina Ortiz
Fotografías: cortesía
